En diálogo con CTA Comunica, el secretario general de CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, describió: “El Congreso fue muy provechoso para nosotros, porque necesitábamos un ámbito de debate. Poder realizar en forma colectiva un balance del año, en el que se rescató de manera positiva el papel que jugó la CTA en el marco de una Argentina castigada por la política del ajuste y de la recesión económica que aplicó el gobierno de Mauricio Macri y los ministros que componen este gabinete que es como una especie de seleccionados de ceos de multinacionales y de banqueros vinculados a la especulación financiera”.

Además, Yasky agregó: “En este balance, vertido desde distintas ópticas por compañeras y compañeros de todo el país, resalta el papel que jugó la Marcha Federal, pero también el intento de encontrar la unidad en la acción con las centrales y los movimientos sociales, lo que significó en ese camino el acto conjunto del 29 de abril, que lamentablemente después no pudimos seguir sosteniendo porque la CGT decidió en un determinado tramo del año hacer una especie de voltereta, por lo cual quedó trunca la posibilidad que creemos debemos retomar. Fue una de las decisiones. Retomar el intento de construir acciones comunes para tratar de sostener el año que viene una confrontación que va a ser muy fuerte, muy a fondo en defensa de la paritaria libre. El gobierno ya da señales claras de que quiere una paritaria no solamente con techo, sino con techo bajo, y eso no lo podemos aceptar”.

El cierre estuvo a cargo del secretario general adjunto de CTA, Jorge Hoffmann. Al respecto, el titular de CTA de los Trabajadores resaltó: “También dentro del Congreso hubo aportes muy claros de distintos compañeros. Le tocó a Jorge Hoffmann el cierre, quien manifestó claramente que nuestra Central tiene un papel que jugar indelegable y que es seguir siendo el foco más persistente, más intenso, de la resistencia a las políticas neoliberales, tratando de confluir en la construcción de un frente social, sindical, político, que nos permita sumar fuerzas desde los sectores del sindicalismo, de los movimientos sociales, y de los pequeños productores y empresarios para plantear la necesidad de un cambio de rumbo que le vuelva a dar al mercado interno, al consumo de los sectores populares, a la pequeña empresa, el dinamismo que van perdiendo y que hace que hoy estemos en recesión. En un momento del Congreso, también, al final, sobre el cierre, estuvo presente el gobernador de la provincia, el Dr. Miguel Lifschitz y hubo un saludo a los congresales y un reconocimiento por parte del gobernador al papel que está jugando la CTA”.

Para concluir, Yasky remarcó: “En el marco del Congreso quedamos realizar un plenario de secretarios generales en febrero. Hay líneas de acción que se tienen que profundizar, como intensificar, ahora, en lo inmediato, la lucha para lograr la libertad de Milagro Sala. Fue recibida como una excelente noticia, el pronunciamiento categórico de la Confederación Sindical Internacional, que claramente respalda el pedido de Milagro Sala, y exige que esta acción punitoria del gobierno contra una militante social sea subsanada de inmediato. En ese plano hemos resuelto intensificar la campaña con la consigna: ’Una Navidad sin presos políticos’. También se ha planteado entre febrero y marzo estrenar en todo el país la película de la Marcha Federal, convocando a plenarios en los cuales los distintos sectores y nucleamientos sindicales y sociales que participaron, más los delegados de nuestra CTA, puedan debatir, fundamentalmente para extraer las enseñanzas que le den todavía más volumen y más densidad a la segunda Marcha Federal, que resolvió el Congreso debe realizarse antes de cumplirse el primer semestre de 2017".

"Este Congreso fue un ámbito que nos permitió debatir. Hay temas que tenemos que tratar de profundizar, como el de la formación de los cuadros militantes en todo el país; la articulación y la posibilidad de una convocatoria, que vamos a definir en febrero, a un gran encuentro sindical, social y productivo de sindicatos de las distintas centrales, de organizaciones sociales y de pequeños productores tanto de la industria como del agro, y creo que las líneas de trabajo están planteadas. Más que un retiro espiritual, el gobierno, lo que necesitaría en serio es encerrarse a tratar de hacer un mea culpa, modificar el rumbo y devolverle a este pueblo la posibilidad de una vida digna que se le arrebató con estos meses de tarifazos, de aumentos de precios, de una economía que cada vez se entierra más en el fango que ellos mismos han generado, y de un endeudamiento que si no se pega un volantazo en el rumbo económico, nos puede llevar a situaciones de eclosión económica y social que no quisiéramos tener que ver de nuevo en la Argentina”.