Conmemorar el Día de lxs Trabajadorxs tiene un significado de relevancia social: recuerda una jornada de lucha histórica de lxs trabajadorxs, en la cual los referentes de la misma fueron ejecutadxs por la Justicia estadounidense, por pedir mejores condiciones de vida y trabajo. A su vez, rememora las injusticias sociales y laborales que aún perduran. En este aspecto es que para lxs trabajadorxs la lucha y la política son tan necesarias como la comida: porque son sus herramientas de reivindicación para una vida laboral más justa, saludable y digna. 

Por eso, en este 1° de Mayo consideramos imprescindible mencionar otra lucha que lxs trabajadorxs venimos llevando adelante hace tiempo, siendo ésta contra aquellos sectores que pretenden criminalizar y difundir discursos de odio clasistas contra nuestra organización. Tratándonos de violentxs y "anti-derechos", se encargan de tergiversar el objetivo real de nuestras manifestaciones en las calles: obtener mejores condiciones laborales para todxs.

Recordemos, en primera instancia, que el derecho a la protesta está contemplado en nuestra Constitución Nacional como forma de libertad de expresión. Y hagamos memoria, sobre lo acontecido históricamente, incluso el motivo por el cual el Día de lxs Trabajadorxs es tal: las múltiples violencias sufridas por quienes han buscado (y buscan) mediante la organización sindical, incidir en la toma de decisiones por políticas favorables a las condiciones laborales de todxs. Ejemplos sobran, tanto a nivel nacional -la represión a los huelguistas tanto de la Patagonia Rebelde como del Grito de Alcorta, la Semana Trágica, los asesinatos de Carlos Fuentealba y Kosteki y Santillan; o incluso una represión más reciente: la sufrida por lxs docentes que en 2017 montaron la escuela itinerante frente al congreso nacional, por nombrar sólo algunos acontecimientos- como internacional.

Finalmente, cabe mencionar que quienes siembran estos discursos del odio y se oponen a la organización y manifestación de lxs trabajadorxs, son quienes forman parte de los sectores económicos concentrados, también organizados, pero sólo en beneficio propio: recordemos que la mitad más pobre de la población tiene apenas el 2% de la riqueza mundial, mientras el 10% más rico detenta el 76% de la riqueza mundial.

Por ello, en este 1° de Mayo, además de saludar a todxs lxs trabajadorxs, reivindicamos y celebramos la lucha y vida de nuestrxs predecesorxs, de nuestrxs compañerxs. Para que los derechos laborales sean una realidad igual para todxs, ¡Felíz jornada de lucha y organización!