Tras sostener nuestro pedido de continuidad de lxs suplentes por dispensa, el Ministerio de Educación dictó la resolución Nº 684/21 a través de la cual dejó asegurada la continuidad de todxs los trabajadores de la educación que se desempeñan como suplentes por dispensas.

La normativa ministerial es el resultado del trabajo persistente realizado por la UTELPa en distintas reuniones sostenidas a lo largo del último tiempo.

La medida alcanza a lxs docentes que en la actualidad cumplen funciones presenciales, en lugar de lxs dispensadxs. Mas allá del regreso progresivo de estudiantes y dispensadxs a las aulas, lxs suplentes continuarán trabajando al menos hasta el 31 de diciembre del corriente año.

Nuevo protocolo para la presencialidad

Centenares de delegadxs y referentes de la UTELPa se reunieron virtualmente en diversas instancias esta semana para socializar y poner en común los nuevos lineamientos del protocolo de regreso a la presencialidad. Según destacaron autoridades del sindicato, las reuniones se realizan tras haber consensuado el nuevo protocolo en el marco de la COMISSET (Comisión Mixta de Salud y Seguridad en el Trabajo).

El documento acordado establece que para el reinicio "de las actividades presenciales deberán tomarse los recaudos necesarios para que las condiciones de salubridad e higiene de los establecimientos educativos sean la adecuadas para la preservación de la salud de las y los docentes , las y los estudiantes, personal directivo y auxiliar abocado a la labor educativa"; en línea con lo acordado por Acta Paritaria nacional del 22 de Febrero, que en el punto 4 dispone: "Aceptar las recomendaciones básicas de prevención elaboradas por la Superintendencia de Riesgos del Trabajo dependientes del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, para los centros educativos del País".

El nuevo protocolo será monitoreado y, de ser necesario, podrá modificarse -siempre- de acuerdo a las recomendaciones de las autoridades sanitarias. Desde UTELPa sostenemos la importancia que tiene este logro ya que mantenemos en tiempos de crisis los puestos de trabajo. A su vez, nos permite fortalecer y enriquecer la tarea docente, recuperar las trayectorias pedagógicas más debilitadas por la pandemia, y pensar en una nueva escuela que reivindique la calidad educativa y la inclusión.