El nuevo titular del Ministerio de Educación nacional, Nicolás Trotta, anunció la reapertura de la paritaria nacional docente, que había sido «bajada» en 2017 por un Decreto de Necesidad de Urgencia del ex presidente Mauricio Macri, y que era uno de los principales reclamos sindicales del sector.

UTELPa, entidad de base de CTERA, participó activamente de la Escuela Itinerante, delas Marchas Federales, y de todas las acciones propuestas por la Confederación Nacional de Trabajadores de la Educación, para lograr su nueva puesta en vigencia.

Fueron mas de tres años de luchas, en las que quedó congelado el Incentivo Docente, se incrementaron notablemente las asimetrías salariales entre las diferentes provincias, se profundizó la migración (y el consecuente desarraigo) de docentes hacia los distritos con mejor remuneración; y cayó notablemente la inversión educativa en general, al tiempo que desaparecieron los programas socioeducativos.

Todo ello fue la consecuencia natural de la decisión del ahora expresdiente (y de sus ministros de educación) de "dejar caer" la Ley de Financiamiento Educativo, y de no convocar a la Paritaria Nacional Docente.     

La reciente convocatoria por parte de las nuevas autoridades nacionales, tiene sabor a "reivindicación" para el sector, aunque, claro, habrá que esperar las propuestas concretas.

De todos modos, la sola convocatoria a la Paritaria evidencia, en sí misma, todo un cambio respecto de la relación que el nuevo gobierno pretende mantener con los sindicatos docentes.   

En ese sentido, la secretaria general de UTELPa, Lilia López, dijo que «estamos con muchas expectativas, porque nos vamos a poder volver a sentar en ese ámbito para poder discutir un piso salarial, para que ningún docente del país quede por debajo. Sino que además en ese ámbito nosotros discutimos condiciones laborales y participamos de la definición de las políticas educativas».

Paritaria Provincial

Por otra parte, en la semana que entra, habrá una nueva reunión con las autoridades provinciales para definir el monto de la suma fija que habitualmente se otorga hacia fines de año. En tal sentido, Lopéz consideró que el dinero que se acuerde "debería compensar el desfasaje salarial que hemos sufrido a lo largo de éste año", ya que si bien los incrementos salariales fueron otorgados con cláusula gatillo por inflación, "es sabido que la inflación de alimentos, servicios o medicamentos es mayor, por lo que esa suma debería compensar esa pérdida", concluyó.